De tener que compararte con algo,
Serías la noche que brinda recuerdos,
El despertar agitado de insomnios de sueños,
El renacer del grito de esperanzas dormidas,
Del abrazo que acompaña cada una de las caídas…

De tener que compararte con algo,
Serías la risa que asesina nostalgias,
La piel, de tu piel en mi piel, que eleva el alma.
La gota del llanto cayendo en el pecho,
Las palabras que se olvido de llevarse el viento,
La entrega que destroza promesas,
El sonido de la lluvia en el atardecer de invierno…

Si tuviera que compararte con algo,
Serías los amaneceres de la felicidad postergada,
El guiño de un ojo supliendo palabras,
El templo de rosas bañadas en sangre,
El aliento asesino de llagas paganas,
Las manos unidas impartiendo batallas,

Si tuviera que compararte con algo,
Llevaría tiempo y tiempo es el que falta,
Para poder demostrarte a cada paso,

Que has llegado a mi alma….